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Crujiente de pollo con mermelada

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La receta de hoy es perfecta para tomar como aperitivo y queda bien tanto en caliente como en frío: el crujiente de pollo con mermelada. Porque, en este caso, usaremos un toque dulce como acompañamiento del ingrediente salado.

En este caso, proponemos combinar el crujiente de pollo con mermelada de higo o con mermelada de ciruela y kiwi. ¿Por qué motivo? Porque combinan muy bien con los sabores salados. Ponte el delantal, ¡que empezamos!

Pasos para elaborar el crujiente de pollo con mermelada

  1. Antes de empezar a rebozar las pechugas, conviene decidir la forma que queremos darle. Podemos hacer la pechuga fileteada, pero también cortarlas en tiras para preparar los conocidos como fingers de pollo.
  2. Una vez tengamos el pollo cortado al gusto, lo salpimentamos. Preparamos tres recipientes en los que ponemos pan rallado, harina y los huevos batidos.
  3. Para rebozar el pollo, lo vamos pasando respectivamente por los platos de harina, huevo y pan rallado. Una vez que los trozos estén bien impregnados, los ponemos a freír en abundante aceite bien caliente.
  4. Freímos bien cada trozo de pollo por ambos lados. Cuando estén listos, los sacamos a un plato con papel absorbente para que escurra el exceso de aceite.
  5. En cuanto a la presentación, acompañamos el crujiente de pollo con un recipiente con las mermeladas seleccionadas y, ¡a disfrutar!

Y vosotros, ¿por cuál de las dos sabores os decantáis? ¿Por la mermelada de de higo o por la de ciruela-kiwi?

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