¿Estás pensando en cómo hacer el mejor arroz blanco con tomate? En Helios queremos ayudarte a conseguir este nuevo logro con algún truco y con nuestro tomate frito como gran aliado en esta tarea. Aunque seguro que la cocina se te da de rechupete, siempre hay algo que se nos resiste o algún plato sobre el que nos queda por aprender algo nuevo. Incluso aunque estemos hablando de un clásico donde los haya de nuestra gastronomía como este. Sin duda, uno de los predilectos de los más pequeños a la hora de sentarse a la mesa.

Y es que no entenderíamos nuestra manera de ser sin la dieta mediterránea. Ya sabes, esa combinación entre productos naturales y nutritivos con el mejor sabor y la máxima calidad. Valores que Helios integra desde hace generaciones. Y dentro de la dieta mediterránea, el arroz es uno de los alimentos más importantes, un protagonista principal de nuestra mesa. Es uno de los cereales más presentes no solo en nuestra gastronomía, sino más consumidos en todo el planeta.

El arroz es un alimento especialmente versátil. Podemos comerlo de varias maneras en nuestra cocina tradicional y, cómo no, en otras más internacionales. En nuestras casas siempre se ha comido, además del típico arroz blanco, el frito, con habichuelas o con pollo. Por supuesto, es la base de uno de nuestros platos estrella, la paella. En otras latitudes, son muy habituales el arroz al curry o como acompañamiento al pescado en el sushi, ambos originarios del continente asiático. Pero ahora, centrémonos en ese clásico tan familiar que es el arroz blanco con tomate.

Descubre cómo conseguir un arroz blanco que les vuelva locos en casa

¿Quieres que te salga el mejor arroz blanco con tomate? ¿Ese con el que los más pequeños de la casa (y no nos engañemos, también los mayores) se chuparán los dedos, un nuevo plato favorito familiar? Vamos a darte algunos consejos para ello. Los ingredientes son muy sencillos, como verás. De momento, solo necesitas arroz, agua, aceite de oliva. Aquí va el primer consejo. Puedes enjuagar el arroz con agua fría para quitarle el almidón. Así te quedará más suelto. Es importante dejar después el arroz escurriéndose para eliminar el agua antes de hervirlo.

Mientras escurres el arroz puedes ir calentando aceite en una olla con fuego no demasiado alto. Cuando esté caliente, añade el arroz hasta que se dore. Cuando eso pase, echa el agua y la sal a la olla en la que ya está el arroz. Ya solo tienes que dejar que hierva y cocinarlo a fuego lento durante aproximadamente 20 minutos. Cuando lo retires del fuego, puedes dejar que se siga haciendo con su propio calor con ayuda de una tapadera. Y ya casi ha llegado el momento decisivo.

El toque maestro lo pone nuestro tomate frito. Elaborado con aceite de oliva y tomates de cultivo local de los campos de Extremadura y de Andalucía, es el ingrediente que te falta para convertir el arroz blanco en un plato perfecto. Ya sea como un primero o como acompañante y guarnición de un segundo de carne o pescado, lo que es seguro es que no quedará nada en el plato. Con el tomate frito Helios no solo los más pequeños querrán repetir.