Cuando llega el buen tiempo, comienza la temporada de tapeo, terracitas, cervezas con los amigos… ¡algo a lo que nadie puede resistirse! Pero, en paralelo a esto, queremos mantener la línea y no desviarnos de nuestra puesta a punto para el verano. ¿Cómo combinamos estos dos planes? ¿Cómo podemos salir de tapeo y no saltarnos la dieta? Hoy os echamos un cable:

– Bebidas sin azúcar: Granizados, tés… Incluso un tinto de verano es preferible a la cerveza, ya que al fin y al cabo está elaborada con carbohidratos.

– Renunciar a los fritos: Sí, aunque nos cueste. Es algo que tenemos que afrontar si no queremos echar por la borda todo el esfuerzo durante el resto del año.  Evita cualquier tapita que lleve rebozado, patatas, croquetas, empanadillas o cosas de conlleven fritura.

– Apuesta por las verduras: las verduras y hortalizas pueden ser nuestro aliado a la hora de pedir tapas. Tomate aliñado, brochetas de verduras o gazpachos y salmorejo.

– Ibéricos: ¡Claro que podemos comerlos! Elige tapas de jamón con tomate, o similares. Nuestro gran embutido es pura proteína, te llevarás a la boca sabor, y menos grasas saturadas.

– Pescados: salpicón de marisco, sardinillas, boquerones a la plancha, mejillones, ventresca de atún o pulpo. Tapas deliciosas que no contienen grasas y sí mucha proteína.

Así que ya sabéis, seguir una dieta saludable no está reñido con disfrutar con amigos del buen tiempo 😉