Si hablamos de la empanada gallega lo estamos haciendo acerca de uno de los símbolos de nuestra gastronomía. Sin duda forma parte de todos esos clásicos que se nos vienen rápido a la cabeza pensando en nuestra comida. Algunos de nuestros platos más típicos han hecho de la gastronomía española una de las más reconocidas del mundo. Es variada, versátil, rica y está compuesta además por ingredientes naturales que a su vez hacen parte de la dieta mediterránea. Como sabes, está considerada como fundamental a la hora de llevar una alimentación equilibrada.

Como decimos, dentro de esa gastronomía podemos encontrar diferentes platos. Ahí están la tortilla de patatas, el cocido, la paella, el gazpacho, el pisto, las croquetas o embutidos como el jamón serrano. Pero también ocupa en ella un lugar destacado la empanada gallega. Se trata además de un plato especialmente adecuado para compartir en familia debido a su tamaño y a unos ingredientes que gustan a grandes y pequeños. Es fácil verla como una de las protagonistas de celebraciones familiares y entre amigos.

La empanada es además un plato con historia. Al parecer, se consumían ya desde tan antiguo como el siglo VII en lo que hoy es Galicia. Su forma la convertía en un bocado muy práctico para ir tomando mientras se caminaba. Con los siglos, han pasado a ser un verdadero “buque insignia” de la gastronomía gallega, donde es muy común encontrarla en todo tipo de bares, restaurantes y en las casas particulares, y también de la gastronomía nacional.

Tu empanada gallega, con Helios

Hay varios tipos de empanadas. Se suelen clasificar según el relleno que llevan. Las más habituales son o bien de pescado o de marisco o de carne. Dentro de estas, las más comunes suelen ser las de bonito, atún, sardinas, pulpo o carne picada de cerdo. En realidad, se pueden hacer empanadas con todo tipo de relleno que se nos pase por la imaginación. Pero lo que es importante en muchas de ellas es contar con un buen sofrito.

El sofrito le dará consistencia al relleno y además potenciará el sabor de los ingredientes principales de este. Es una de las partes que más hay que cuidar, junto a la masa de la empanada que normalmente está hecha de harina, levadura y huevo. Puedes añadir pimentón, sal y aceite de oliva a nuestro sofrito y mezclarlo con el ingrediente principal, que puede ser por ejemplo un tradicional atún y pimiento rojo. Una vez rellena la masa, se hornea y listo. Ah, y no te olvides del truco de “pintar” con huevo batido la parte superior de la masa para que quede brillante y llamativa.

Con una empanada así, todos en casa, grandes y pequeños, se chuparán los dedos. Son pocos los paladares que pueden resistirse a un plato tan delicioso y que acompaña en los buenos momentos para compartir. Y todo con la comodidad que te aporta nuestro sofrito con los mejores tomates desde el origen. Porque en Helios queremos hacerte la vida más fácil.