Si estás pensando en preparar un helado casero este verano, has llegado al lugar indicado. En Helios queremos que disfrutes de un verano de lo más especial, uno de aquellos que te recuerde a los de nuestra infancia. Cuando realmente podíamos descansar tanto como pasarlo bien, cuando las vacaciones parecían no acabarse nunca. Y como parte de ese deseo nuestro, vamos a intentar ponerte más fácil que nunca sacarle todo el partido a este verano. Y ahora, adentrémonos en el fascinante mundo del helado.

Vamos a ver, antes de ponernos con las manos en la masa, o en el helado, cuál es la historia de este deseado bocado. Parece ser que ya civilizaciones tan antiguas como la china o la persa, varios siglos antes de Cristo, ya añadían hielo a zumos de frutas o leche o que este se utilizaba para enfriar algunos alimentos. Después serían también los árabes quienes tomasen algún antepasado de nuestro actual helado, que comenzaría a tomar forma a finales del siglo XVII. Es entonces cuando en París abrió la primera heladería de la que se tiene noticia. Desde ese momento, la historia del helado es una de enorme éxito y popularidad.

La presencia del helado ya hace tiempo que no se limita al verano. Ya no solo los asociamos a la playa o a la piscina. Aunque sea uno de los mayores símbolos de esta estación, podemos disfrutar de él en cualquier momento del año. Y sus tipos son también de lo más variado. De crema o de hielo, en cono o en tarrina, con palo o en plato, de corte acompañados de galleta o barquillo, de sabores como nata, chocolate, fresa, vainilla, pistacho, menta, naranja, limón…

Este verano, anímate a crear tu helado casero con Helios

Podemos afirmar que hay un helado para cada momento y para cada persona. Pero, sobre todo, que, como tantas otras cosas, el helado puede saber mejor si está hecho en casa. Al fin y al cabo, así es como se preparan aquellos alimentos o platos que, además de hechos con buenos ingredientes, cuentan con el del cariño porque están pensados en agradar a nuestras personas favoritas, ya sean familiares o amigos. Por eso, te animamos a que este verano te lances a preparar tu helado casero con nosotros.

Para ello, debes contar con algunos ingredientes básicos. Por ejemplo, pensemos en un clásico como el de vainilla. Necesitarás solo esta una o dos cucharadas de extracto de vainilla, nata montada y leche condensada. Batimos bien la nata. Agregamos el extracto de vainilla a la leche condensada y, a su vez, el resultado lo mezclamos con la nata montada. Lo ponemos todo en un recipiente hermético y tapado con papel film y lo dejamos reposar en el congelador durante al menos cinco o seis horas.

Et voilà! Ya tenemos nuestro helado casero listo. Pero ahora falta lo más importante. El toque maestro. ¿Y sabes cómo vas a conseguirlo? ¡Exacto, con Helios! Más concretamente, con nuestros siropes. Sabores hay para elegir: caramelo, chocolate, fresa o frutos del bosque, y también los tienes disponibles en su versión 0% sin azúcares añadidos. Coronarán de manera increíble los helados caseros de mil sabores que sin duda serán los reyes de tu verano.